“Déjalos”: Un Cambio Simple Para Cuidar Tu Salud Mental
En nuestra cultura, nos enseñan a ser fuertes, a cuidar a los demás, a no quejarnos aunque estemos mal por dentro. Nos dicen que hay que trabajar duro, ser humildes y aguantar. Pero ¿qué pasa cuando todo eso nos deja cansados, tristes o solos?
Ahí fue cuando conocí algo llamado la teoría de “Déjalos”. Es una idea simple:
- Si quieren irse, déjalos.
- Si no te apoyan, déjalos.
- Si hablan mal de ti, déjalos.
Soltar no significa que seas débil. Significa que estás eligiendo tener paz. Y cuando vienes de una comunidad que ya lleva mucho encima, la paz vale oro.
Aquí te dejo cómo esta mentalidad me ayudó a cuidar mi salud mental y cómo puede ayudarte a ti también:
1. No gastes tu energía en quienes no te valoran
En nuestras familias y barrios, siempre hay presión para quedar bien, para seguir en contacto, aunque te esté haciendo daño. No tienes que seguir detrás de quienes no te buscan ni te respetan.
Consejo: Cuando te sientas dolido o ignorado, recuérdate: “No tengo que rogar para que me valoren. Si no lo hacen, los dejo ir en paz.”
2. No puedes arreglar a todo el mundo
Muchos de nosotros crecimos siendo los fuertes de la familia. Pero cargar con todo y con todos te va a dejar vacío. No eres egoísta por cuidarte a ti mismo.
Consejo: Tómate al menos 10 minutos al día solo para ti, caminar, orar, escuchar música. Tú también mereces descansar.
3. No dejes que la culpa te quite la alegría
Muchas veces sentimos culpa por decir “no”, por descansar, por pensar en nosotros. Pero la alegría no se tiene que ganar sufriendo primero. La mereces por el simple hecho de ser tú.
Consejo: Pregúntate: “¿Qué me da paz o alegría?” Haz más de eso, aunque sea algo simple como bailar en casa o reírte con tus hijos.
La teoría de “Déjalos” trata de liberarte. De la culpa. De la gente que te hace daño. De tener que estar explicándote todo el tiempo.
No se trata de faltar el respeto, se trata de sanar. Y sanar es algo que todos merecemos, no importa de dónde venimos.
Aviso: Este blog está basado en experiencias personales y observaciones. No es consejo profesional. Si estás luchando con tu salud mental, habla con un terapeuta, consejero escolar o clínica local. Pedir ayuda no es debilidad, es valentía.
Comments
Post a Comment